El sueño


Cuando en la noche
te envuelven
las alas del sueño,
y queda tu cuerpo
tendido en silencio,
no tiene tu cara
señal de fatiga,
y sólo se siente
tu corazón inquieto,
es entonces, alma mía,
cuando daría todo
por ser tu utopía.

© Nicanor García Ordiz, 2010.